DIARIO DE UNA FUTURA M.D.

- Creo que te debo una explicación, Harry –dijo Dumbledore con voz vacilante-. Supongo que alguna vez te habrás preguntado por qué nunca te he nombrado prefecto. Debo confesar… que me pareció que ya tenías suficientes responsabilidades.

Harry levantó la cabeza y lo observó, y vio que una lágrima resbalaba por la cara de Dumbledore hasta perderse en su larga y plateada barba.

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El dolor físico era inmenso, pero pronto sus morfinas naturales comenzaron a actuar, anestesiando así todo su cuerpo. Lo que no pudo frenar era el dolor en el alma que tanto la sacudía y la quebraba en dos. Estaba a punto de morir, pero todavía seguía con la culpa. Tenía que decirle a Harry por qué lo había traicionado y que todo se le había escapado de sus manos, una vez más, como el agua del mar. Pero sabía muy bien, que a pesar de que doliera por dentro y se desangrara su corazón, de que nunca más volvería a ver ese par de ojos verdes y llenarse de la sensación de que nada iba mal cuando se encontraba junto a su presencia.

{ Mi eterna imaginación a ramificado la historia de Harry Potter muchas veces, soy una especie de Potterfic adicta. No tienen idea de la cantidad de ideas buenas que tengo la cabeza. Algún día se las diré a J.K. Rowling y las va a hacer libro, créanme. No puedo creer que ya se acaba todo, 14 de julio, no más películas, no más Harry Potter L }